Rutas Altas

RUTA LAS MARGARITAS: "EL SUSURRO DE SANTA BÁRBARA, UN CAMINO A PUENTE TIERRA

Altitud mínima: 1.027 m | Altitud máxima: 1.909 m

Distancia: 26 km | Duración: 9 horas

En las montañas de Manzanares, Caldas, se oculta un tesoro natural que despierta los sentidos y acaricia el alma: la majestuosa cascada de Santa Bárbara es un velo de agua celestial. Esta maravilla natural se precipita desde lo alto, pintando el paisaje con una magia indescriptible.

Cuando te acercas después de recorrer caminos sinuosos en medio de la montaña, el susurro del agua en su descenso te envuelve con su música ancestral. La ruta hacia la cascada es un serpentear de caminos entre exuberante vegetación, donde los árboles completan este marco de frescura y belleza. El aire está impregnado de una fragancia herbal, como si la naturaleza misma estuviera exhalando su perfume más puro.

Al llegar a la base de la cascada, el espectáculo alcanza su máximo esplendor. El agua cae con una gracia inigualable, formando delicadas cortinas líquidas que refrescan al caminante. Los rayos del sol se filtran entre las hojas de los árboles, creando arcoíris fugaces que adornan el paisaje con destellos de color que guardan en su luz la sabiduría de los tiempos, eliminando vestigios del pasado, como el puente de tierra que nos recuerda que otros estuvieron aquí antes que nosotros.

La cascada de Santa Bárbara no solo es un regalo para los sentidos, sino también un recordatorio de la importancia de preservar y proteger nuestro entorno natural. En su belleza encontramos inspiración para cuidar y valorar el tesoro invaluable que la madre tierra nos ha brindado.

RUTA AGUABONITA: "CAMINOS DE ENCANTOS, HISTORIA Y NATURALEZA, ¡UNA AVENTURA POR DESCUBRIR!"

Altitud media: 1.736 m | Altitud mínima: 1.190 m | Altitud máxima: 2.313 m

Distancia: 22.5 km | Duración: 8 horas

En el corazón de la exuberante región montañosa de Manzanares, Caldas, encontrarás una ruta llena de altibajos, caminos sinuosos y llenos de historia, que te llevará a un viaje hacia el descubrimiento de hermosas fincas cafeteras, gente alegre y sencilla que te invitará a conectar con la naturaleza y a trepar la ladera, que antes era un camino de herradura y hoy es un sendero más amigable con el caminante a través de la vereda Quimula, que conduce al pintoresco corregimiento de Aguabonita. Desde el momento en que te aventuras en este camino, te sumerges en un mundo de maravillas naturales que despiertan los sentidos y alimentan el alma.

El sendero hacia la montaña está cubierto de un manto verde esmeralda y rojos frutos de café, que adornan los árboles que se mecen suavemente al compás del viento y el canto de los pájaros. A medida que avanzas, te encuentras con arroyos cristalinos que brotan entre las piedras, creando un murmullo abrazador que acompaña tus pasos y te guía en tu travesía. Hallarás miradores naturales que te ofrecen vistas panorámicas de ensueño. Desde lo alto de las colinas, podrás contemplar las montañas circundantes donde los cultivos y casas coloridas llevarán tu vista majestuosamente hacia el horizonte, como guardianes eternos de la belleza de la región, y donde al terminar la cuesta, te encontrarás con la calidez de la gente de este bello territorio, quienes estarán felices por tu llegada.

RUTA LA CAMPIÑA: “TRAS LAS HUELLAS DEL ANCESTRAL ARRIERO Y SU COMPAÑERO FIEL”

Distancia: 25.9 km | Duración: 9 horas

Altitud máxima: 2.450 m | Altitud mínima: 1.871 m

Imagina adentrarte en un viaje a través del tiempo, siguiendo los pasos de los arrieros que una vez recorrieron los caminos de herradura entre los municipios de Manzanares y Marulanda en el corazón de Caldas. Este antiguo camino, testigo silencioso de incontables historias y aventuras, es mucho más que una ruta; es un viaje lleno de tradición, belleza y conexión con la historia de nuestra tierra.

El camino de herradura se abre paso entre paisajes de ensueño, donde las montañas se alzan majestuosas hasta donde alcanza la vista. A lo largo de la ruta, te encontrarás con puentes de piedra centenarios que cruzan caudalosos arroyos, y con antiguas fincas que aún conservan su encanto y belleza de los tiempos de antaño.

Pero más allá de su belleza escénica, el camino de herradura es un viaje en el tiempo que te permite conectarte con las tradiciones y el espíritu pionero de nuestros antepasados. Aquí, entre los caminos de piedra que marcan el sendero, sentirás la presencia de aquellos arrieros que, con valentía y determinación, recorrían estas tierras en busca de aventuras y oportunidades para ellos y sus familias.

MANZANARES - LA ARGENTINA - MANZANARES: CAMINO DEL TESORO VERDE: “DESCUBRIENDO SECRETOS ENTRE LAS MONTAÑAS Y LA INSPIRACIÓN”

Altitud máxima: 2.129 m | Altitud mínima: 1.785 m

Distancia: 22 km | Duración: 8 horas

La región montañosa entre Manzanares y Marulanda, Caldas, la ruta hasta la Argentina, ofrece más que una simple travesía; es un romance con la naturaleza que cautiva desde el primer paso. El camino se abre paso por una antigua carretera, invitando al caminante a descubrir el final del paisaje.

Partiendo desde Manzanares, el camino se despliega con una promesa de aventura. A medida que avanzas, el paisaje se transforma ante tus ojos y el aire fresco de la montaña acaricia el rostro con su aroma a pino y tierra húmeda.

El paisaje se convierte en un lienzo vivo de belleza sin igual a medida que avanzas. Los picos de las montañas se funden contra el cielo azul, dejando un inmenso horizonte por descubrir.

Pero el viaje no termina aquí; cada paso es una oportunidad para descubrir nuevos tesoros ocultos en el camino. Los arroyos cristalinos murmuran melodías suaves, mientras que los pájaros cantan invitando a seguir la travesía. Cada curva revela una nueva vista panorámica, una nueva razón para maravillarse ante la grandeza de la naturaleza.

Y así, entre sudor y nostalgia, el camino de regreso a Manzanares se convierte en un viaje inolvidable, una experiencia que deja una huella imborrable en el corazón del caminante. Porque en Manzanares y en la ruta hacia Argentina, la belleza de la naturaleza se entrelaza con la calidez de su gente, creando un destino que enamora y cautiva a todos los que se aventuran a descubrirlo.